16 octubre 2008

Verdaderos diputados por Murcia

Que buen vasallo si tuviese buen señor. He recordado la frase del Cantar de Mio Cid cuando he leido en prensa la bufonada de la votación para tomar en consideración el proyecto de estatuto de Castilla La Mancha. De los socialistas murcianos no se podía esperar demasiado en este asunto, y sólo dos hombres, de los que puede decirse que se visten por los pies, han hecho honor a su condición de tales y de murcianos.

Los diputados populares por Murcia, Alberto Garre y Arsenio Pacheco han hecho lo que tenían que hacer, pasarse por el forro esa disciplina absurda y onanística de la disciplina de partido y votar en conciencia, será porque la tienen, desde luego.

A este acto lleno de coraje y valentía se ha sumado Rosa Díez, quién cada vez se asegura un voto más favorable en las elecciones europeas y aún es dudosa la actitud de García-Legaz, de quién se dice que no ha votado en ningún sentido. La alcaldesa de Cartagena, Martínez Pujalte y alguno más no han hecho nada digno de destacar, más que el silencio complice.

Estas cosas son las que le fastidian a Rajoy, Cospedal, Soyaya y Celso, y en general a toda la Corte de los Milagros de Génova, pues nos recuerdan que frente al partidillo de Mariano sigue quedando gente con principios que podrá volver a Murcia con la cabeza muy alta tras rechazar, desde el primer momento, un texto que pretende finiquitar un claro, y constitucional, ejemplo de solidaridad entre regiones.

En frente un Barreda con tono tosco y desafiante, que amenaza con no aceptar cualquier texto que, enmendando lo polémico, pueda salir de la Cámara Baja, gran ejemplo de cintura democrática, de consenso y de respeto a la Soberania Nacional en una palabra.

Como decía, Garre y Pacheco, Don Alberto y Don Arsenio, pachequero el uno y de Abarán el otro, han sido hoy los verdaderos protagonistas de la vida parlamentaria. Han demostrado que los murcianos tienen al menos dos representantes en el Congreso, desafiando los ridículos 300 euros con los que Pons y la Cospedal pretendian fustigar su honor en forma de sanción disciplinaria.

Sólo un gesto nada más, impotente e ineficaz si se quiere, pero de gran trascendencia por estas tierras, una actitud valiente y sin complejos. En definitiva, la verdadera aplicación del programa electoral del Partido Popular negado por los marianistas y un bofetón para los aduladores y babeantes del poderoso de turno sea de tu partido o provenga de la trinchera opuesta.

4 comentarios:

Mike dijo...

Seguramente Luis Herrero también tendrá problemas, por haber hablado claro. Es otro valiente.

Saludos.

Antonio Rentero dijo...

No diré más que el comentario generalizado en el despacho es que lo que hay que hacer es fundar un partido SERIO regionalista. Con 4/5 diputados que sacara en Murcia ya habría alguien en la Carrera de San Jerónimo dispuesto a traernos él mismo el agua en cubos con tal de contar con los votos de ese partido (véase Coalición Canaria, por ejemplo).

¿Es el momento de un Ciudadanos de Murcia? ¿Será el momento de dejar izquierdas y derechas y poner a MURCIA por delante de todo discurso ideológico?

Querido Imperator, espero fervientemente que con esta idea tengas un empuje para tus siempre interesantes reflexiones y te dé para una entrada sesuda y de las que crean debate interesante, seguro que el resto de habituales del blog tendrán algo igualmente interesante que opinar al respecto...

Así está Murcia dijo...

Yo también he pensado en la idea de un partido regionalista, que haga lo que debería hacer el resto, defender a esta parte de España que es Murcia.

Por cierto, ya que mi firma es una de las 120.000 que llevaron los regantes, me uno a su petición, y me comprometo a sufragar parte de los 600 euros de sanción que lleva votar en conciencia en este sistema "democrático"

Imperator dijo...

A mi es que la cosa regionalista evocando el refajo, el arrope o el puerto de culturas (o Cool-tura de esa nueva) pues como que le veo poco futuro. Aunque una CiU reconozco que estaría gracioso.

Si, somos demasiado catetos para eso, y encima si en el partido murciano ese recalan personajes como el consejero pregonero,que se dijo en su època, vamos apañaos.

Virgencica, virgencica, que me quede como estoy. Buen lema, ¿no?