02 noviembre 2006

Los ciudadanos llegan al Parlament

Las hipótesis sobre el futuro "honorable" (u orinable como dice un amigo) que ocupará la Presidencia de Cataluña empiezan, ahora sufriremos un mes donde se decidirá si se reedita el gobierno de progreso, sobre todo para "ellos", o si CIU monta el "tinglao" con la ayuda de Carod.

Para mi, y sin ningún género de dudas, los auténticos vencedores de la jornada de ayer fueron la coalición de Ciudadanos de Cataluña-Partido de la Ciudadanía, que lidera el joven Albert Rivera, de 27 años, representando el voto cansado y descontento con la deriba nacionalista, del ciudadano de a pie que pasa olímpicamente de la Cataluña Imperial o de la Cataluña super progre y mega guay.

Rivera, abogado de profesión y trabajador, en excedencia, en el departamento jurídico de La Caixa, ha señalado en varias ocasiones que No aspiro a ser un político profesional, sino a ser un profesional dedicado temporalmente a la política. Es un buen ejemplo de profesional joven y comprometido con su sociedad y con su tiempo, ha hecho de un axioma, tan lógico como evidente, el motor de su discurso electoral: se siente tan catalán como español y quiere que su Región vuelva a ser el motor de España. Son planteamientos serenos y coherentes que los politicuchos profesionales han dejado de lado para medrar a costa del contribuyente de a pie, olvidando la más que posible mediocridad en los aspectos profesionales, o en otros, de sus vidas.

Me parece muy significativo, y especialmente gratificante, que un grupo de ciudadanos con distintas inquitudes y aspiraciones vitales se hayan unído y hecho frente a los partidos políticos clásicos. Esto si es auténtica esencia democrática, la participación del pueblo en los asuntos públicos, o aún más, la propia decisión verdaderamente popular de qué cuestiones han de elevarse a la categoria de objetivos públicos.

Parece ser que existen agrupaciones de este movimiento ciudadano en otras partes de España, y como ha señalado el propio Rivera, el partido tiene vocación de implantación nacional, pues nada mucha suerte y adelante.

Temblad vividores de la política, ¿llega vuestro fin?

2 comentarios:

Cayo dijo...

Ojalá llegue el fin, no sólo de los vividores a nivel nacional sino de ... Uy, uy, uy, que me estaba emocionando, jeje.

Pues sería una opción a considerar, pero vamos, que no pido yo el fin para nadie, que estén todas las opciones, y quien quiera votar a un corrupto o a un tío al que una Caja de Ahorros, en teoría "de todos", perdona mil millones de pesetas, pues que lo haga. Ahora bien, que exista también un rincón para la dignidad y la libertad.

PD: Dani, creo que con el artículo de Imperator queda más o menos saciada tu curiosidad, no obstante, si quieres preguntar algo más allende los mares...

Un saludo a ambos.

Imperator dijo...

Siento interés por ver la evolución de este movimiento cívico en otras provincias, hay muchos cansados de los partidos convencionales y de los vividores apesebrados que cobijan.

Saludos.