El revisionismo histórico se extiende al Partido Popular

Leo con asombro y avidez la entrevista concedida al diario prisaico El Pais por el jefe de los ideólogos de Mariano Rajoy, Juan Costa con su interlocutor el pertinaz y partidario Ernesto Ekaizer, lejos quedan ya los murmullos de boicot y absentismo a los medios del fallecido Polanco, y es que no hay nada que no se pueda digerir con una buena dosis de centrismo made in Génova 13.

De sobra es conocida la afición de la izquierda por escrutar el pasado, sobre todo si hay algún posibilidad de obtener rédito electoral, el periodista de PRISA no iba a ser una excepción, y la entrevista al coordinador del programa electoral del Partido Popular se convirtió en una lección de revisionismo de ciertas decisiones del único lider del partido, léase José María Aznar, que ha conseguido una mayoria absoluta y ocho años de permanencia en La Moncloa para los suyos.

Los periodistas tienen la, digamos, habilidad de conseguir llevar el titular de la noticia a donde exactamente quieren, pero el político, al que también se presume hábil, ha de saber llevarse al entrevistador a su terreno, sobre todo si se está en un medio hostil.

Costa, en su afán de desligar el proyecto de Rajoy de los gobiernos de Aznar, de los que ambos formaron parte, terminó siendo colaborador necesario en una entrevista donde se dejó entrever lo poco acertado de ciertas decisiones del anterior gobierno, por supuesto me refiero a la Guerra de Irak y la foto de las Azores que llegó a ser calificada por el ex-ministro popular como costosa; una cosa es la autocrítica, que practico y fomento, pero flaco favor se le hace al aspirante Rajoy si en vez de defender los logros del anterior gobierno se dan alas a los revisionistas históricos, y mucho peor si uno se convierte por cobardia o ignorancia en telonero de esa táctica, la factura se expide en marzo, que luego nadie se asombre.