Mi esposa es una perra

Que no salten las alarmas, no estoy insultando a mi esposa, pues no tengo vinculo conyugal alguno, ni la vicaría me ha visto pasar. Resulta que he leído esta noticia y, claro, el cuerpo me pedía escribir del tema: Un hombre en India se casó con una perra para revertir una supuesta maldición que padece desde que mató a pedradas a dos perros.

Ya sabemos la rica multiplicidad de tradiciones que atesoran los pueblos del mundo, y el amor que despierta el can entre la raza humana, llamado por algo el mejor amigo del hombre, lo que pasa es que cuando uno lee estas cosas pues se queda con la misma cara que la novia en la foto.

El joven mozalbete es Selvakumar de 33 años y en evidente edad de merecer; consciente el chico de que sufría una maldición por apedrear perros (sic) decidió desposarse con Selvi, la lozana y pizpireta perrita que le acompaña en la instantánea del desposorio.

Parece ser que el novio, a consecuencia de ese pasado de apedreador de canes, había matado alguno que otro debido a su magnifica punteria, sufría parálisis y sordera (vamos que estaba hecho una pena para la consumación) y siguiendo los consejos de un astrólogo y otras eminencias del lugar decidió coger el toro, en este caso can, por los cuernos y unir sus destinos para limpiar tan vil historial pretérito.

Al finalizar la ceremonia, siguiendo el rito tradicional en el templo de Manamudurai, la exultante pareja agasajó a los múltiples invitados a tan feliz enlace con una opípara merendola; los familiares del novio, confiados en la curación del chico se mostraron pletóricos, por el contrario no hay declaraciones de la familia de la novia.