La vuelta de Rodrigo Rato a España ha hecho saltar todas las alarmas políticas, nadie ha creido la versión del otrora Director-Gerente del Fondo Monetario Internacional de volver a la madre patria por motivos personales.
Los socialistas, con ZP a la cabeza, están protagonizando la legislatura más triste desde el advenimiento de la Democracia: bodas gays, retirada de tropas y broncas a cargo de los papeles de Salamanca y por la relectura de la Guerra Civil y la Transición son el resultado del pobre mandato del presidente por accidente, pese a ello, Mariano Rajoy no apasiona pese a lo fácil que se lo han puesto los socialistas, en especial con el tema de la politica antiterrorista, tan sensible en la opinión pública.
La paulatina aparición de los ratistas en la órbita de poder de Génova 13 puede no ser casual, pero eso es una cosa, y otra muy distinta seria la irrupción del Vicepresidente Económico de José Maria Aznar, no como comparsa de Rajoy en la lista de Madrid sino como cartel electoral en la capital del Reino, es decir, como candidato a presidente.
No digo yo que, visto lo visto, a saber, las sorayas y los elorriagas, Rajoy no necesite toda la ayuda que se le pueda prestar, la cuestión es si Rato se prestará a ser segundón de un lider mucho más mediocre que él, pero que al fin y al cabo fue el tocado por el dedo de Aznar, claro que esto último no parece demasiado problema, ya que pese a lo que se dice en los foros de la progresía el anterior presidente del gobierno sabe que el caché de Rato está intacto tras su aventura americana, al contrario de lo que le pasa a Marianin, avejado tras los problermas que los gallardones piqués y demás grey le proporcionan con demasiada asiduidad. Tampoco creo que el resto de la cúpula popular con margen de maniobra, esto es Acebes o Zaplana, se pongan muy exquisitos ya que la situación actual también es mérito, o demérito, de ellos en gran parte.
Por tanto, Rato candidato es una hipótesis arriesgada si, pero esto pone nerviosos a los socialistas y ni el carismático Bono podría eclipsar a Don Rodrigo como presidenciable, motivo más que de sobra para especular.
Los socialistas, con ZP a la cabeza, están protagonizando la legislatura más triste desde el advenimiento de la Democracia: bodas gays, retirada de tropas y broncas a cargo de los papeles de Salamanca y por la relectura de la Guerra Civil y la Transición son el resultado del pobre mandato del presidente por accidente, pese a ello, Mariano Rajoy no apasiona pese a lo fácil que se lo han puesto los socialistas, en especial con el tema de la politica antiterrorista, tan sensible en la opinión pública.
La paulatina aparición de los ratistas en la órbita de poder de Génova 13 puede no ser casual, pero eso es una cosa, y otra muy distinta seria la irrupción del Vicepresidente Económico de José Maria Aznar, no como comparsa de Rajoy en la lista de Madrid sino como cartel electoral en la capital del Reino, es decir, como candidato a presidente.
No digo yo que, visto lo visto, a saber, las sorayas y los elorriagas, Rajoy no necesite toda la ayuda que se le pueda prestar, la cuestión es si Rato se prestará a ser segundón de un lider mucho más mediocre que él, pero que al fin y al cabo fue el tocado por el dedo de Aznar, claro que esto último no parece demasiado problema, ya que pese a lo que se dice en los foros de la progresía el anterior presidente del gobierno sabe que el caché de Rato está intacto tras su aventura americana, al contrario de lo que le pasa a Marianin, avejado tras los problermas que los gallardones piqués y demás grey le proporcionan con demasiada asiduidad. Tampoco creo que el resto de la cúpula popular con margen de maniobra, esto es Acebes o Zaplana, se pongan muy exquisitos ya que la situación actual también es mérito, o demérito, de ellos en gran parte.
Por tanto, Rato candidato es una hipótesis arriesgada si, pero esto pone nerviosos a los socialistas y ni el carismático Bono podría eclipsar a Don Rodrigo como presidenciable, motivo más que de sobra para especular.
2 comentarios:
Sinceramente, no creo que Rato venga a ser el candidato a la presidencia del Gobierno. Al menos, no en 2008. La verdad es que su incorporación a las listas del PP supone un salto cualitativo respecto de otros nombres que ya están sonando para encabezar listas por algunas provincias, como Soraya Saéz de Santamaría o el mismísimo Adolfo Suárez Illana (sí, en el PP parecen idiotas a veces).
En fin, bienvenido sea Rato, sea cual sea su intención que, espero, sea la de volver a la política.
Como ya digo en el post es una hipótesis arriesgada, pero, ¿y lo bien que nos lo podemos pasar poniendo nervioso al personal?
Por lo demás no sería la primera vez que nos constituimos como grupo de presión, ¿o no?
Saludos calurososs ;)
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