Cualquiera que haga estas declaraciones puede que tenga un problema y precise medicación, si la afirmación proviene de un ministro de la Iglesia y encima es Navidad parece que chirría doblemente, me refiero al caso de las afirmaciones del obispo de Tenerife, Bernardo Álvarez y ese extraño potaje donde ha mezclado pederastia, homosexualidad y consentimiento.Esta visto que los obispos cuando se meten a hablar de cosas que si son de este mundo, parafraseando la cita blíbica, suelen ser poco afortunados en sus aseveraciones, y es que se me antoja, cuanto menos, chocante que alguien, al que se le presume cierta preparación y mundología pueda depositar algo como hay adolescentes de 13 años que son menores y están perfectamente de acuerdo (en relación a los abusos sexuales) y, además, deseándolo. Incluso si te descuidas te provocan (sic).
No sé que es peor, si que la enseñanza del obispo provenga de una creencia cierta en lo que dice o si por el contrario habla desde la experiencia o, tal vez, estancia en alguna diócesis conocida de Estados Unidos o Irlanda, como creyente estas estulticias me preocupan y ofenden doblemente ¿habrá algún puesto de misionero vacante en Kuala Lumpur?
4 comentarios:
Aún siendo cristiano reconozco que la iglesia debería estar más con los pies en la tierra y no hablar como políticos, sino como hombres de Dios.
Un saludo espñaol
Desde luego lamentable, no creo que a nadie, y menos a los católicos, hayan gustado estas declaraciones asquerosas.
Es que la Iglesia acoge a cada personaje... El obispo éste de Tenerife, Setién, los de San Carlos Borromeo dándole torta de chicharrones a Zerolo en la comunión, los opusinos, etcétera, etcétera...
Despúes se extrañan de que cada vez haya más desapego.
Desde luego, me quedo con su base social y con aquellos que prestan un verdadero servicio a la comunidad y no con los jerarcas y grupos de poder y presión varios.
Un saludo.
Desde luego hay veces que la iglesia esta mejor calladita, saludos.
Publicar un comentario