Eduardo Zaplana anuncia su retirada de la portavocia del Partido Popular en el Congreso, Dios nos coja confesados como a alguna soyaya le den ese papel, podría ser el primer papelón de Mariano Rajoy en esta legislatura.
Mucho se ha escrito sobre este político, y no todo ha sido bueno precisamente, ya sabemos lo ingrato que puede ser el españolito sobre todo si una leyenda negra y mediática azuza las conciencias del personal. Le ha tocado al antiguo presidente de los jóvenes liberales y de la Generalitat Valenciana, además de ministro de cuando el Partido Popular ganaba las generales, bregar con todo eso y mucho más, de ahí su habilidad como político y como portavoz aunque algunos se empeñen en no reconocerlo.
Con la marcha de Zaplana, estamos ante las peculiar renovación del partido orquestada por el registrador de Santa Pola: renuevo todas las caras, todas menos la mia. Si señor, y es que cualquier excusa que se busque para jubilar a Zaplana u otros se me antoja caprichosamente coincidente para exigirle lo propio a Rajoy.
Nadie duda a estas alturas de la necesidad de buscar en el centro y la derecha nuevas caras que consigan convencer e ilusionar a todos los aborregados del zapaterismo, de esta forma ciertos personajes ya están demasiado vistos y hay que ofrecer nuevos rostros que vendan el producto, pero cualquier estrategia comercial exigiría idéntico trato con el máximo responsable de la venta, ¿o no?
El paso a la reserva activa de don Eduardo debe de favorecer que personas con nuevas ideas impulsen la etapa que está por venir, ello no debe ser óbice para reconocer su gran albor estos cuatro años. La tarea de portavoz del grupo opositor que ha querido ser apartado de la vida política por el resto de partidos no debe ser un camino de rosas, permítaseme el símil, y ahí Rajoy, ha tenido a Zaplana dia tras dia con un trabajo encomiable que espero sea algún dia reconocido.
La leyenda negra que él y Ángel Acebes han sufrido por parte de los medios de la izquierda, acusándolos practicamente de haber militando en las Waffen SS, dice mucho de lo molestos que han sido para el gobierno del PSOE, es decir de lo útiles que han sido a su partido y al proyecto que defendian, han hecho su trabajo y por eso los fustigadores se han centrado en ellos, incluso más que en el propio lider del PP, lo que debería de hacer pensar a algunos.
Zaplana, el diputado más impecable del Parlamento, abandona la portavocia dejando un listón muy alto, por ello creo de justicia reconocerle su labor y confiar en que no se vaya demasiado lejos. Deseo que su sucesor, o sucesora, esté a la altura del cargo, del partido que representa y también, porque no decirlo, de su antecesor.
Mucho se ha escrito sobre este político, y no todo ha sido bueno precisamente, ya sabemos lo ingrato que puede ser el españolito sobre todo si una leyenda negra y mediática azuza las conciencias del personal. Le ha tocado al antiguo presidente de los jóvenes liberales y de la Generalitat Valenciana, además de ministro de cuando el Partido Popular ganaba las generales, bregar con todo eso y mucho más, de ahí su habilidad como político y como portavoz aunque algunos se empeñen en no reconocerlo.
Con la marcha de Zaplana, estamos ante las peculiar renovación del partido orquestada por el registrador de Santa Pola: renuevo todas las caras, todas menos la mia. Si señor, y es que cualquier excusa que se busque para jubilar a Zaplana u otros se me antoja caprichosamente coincidente para exigirle lo propio a Rajoy.
Nadie duda a estas alturas de la necesidad de buscar en el centro y la derecha nuevas caras que consigan convencer e ilusionar a todos los aborregados del zapaterismo, de esta forma ciertos personajes ya están demasiado vistos y hay que ofrecer nuevos rostros que vendan el producto, pero cualquier estrategia comercial exigiría idéntico trato con el máximo responsable de la venta, ¿o no?
El paso a la reserva activa de don Eduardo debe de favorecer que personas con nuevas ideas impulsen la etapa que está por venir, ello no debe ser óbice para reconocer su gran albor estos cuatro años. La tarea de portavoz del grupo opositor que ha querido ser apartado de la vida política por el resto de partidos no debe ser un camino de rosas, permítaseme el símil, y ahí Rajoy, ha tenido a Zaplana dia tras dia con un trabajo encomiable que espero sea algún dia reconocido.
La leyenda negra que él y Ángel Acebes han sufrido por parte de los medios de la izquierda, acusándolos practicamente de haber militando en las Waffen SS, dice mucho de lo molestos que han sido para el gobierno del PSOE, es decir de lo útiles que han sido a su partido y al proyecto que defendian, han hecho su trabajo y por eso los fustigadores se han centrado en ellos, incluso más que en el propio lider del PP, lo que debería de hacer pensar a algunos.
Zaplana, el diputado más impecable del Parlamento, abandona la portavocia dejando un listón muy alto, por ello creo de justicia reconocerle su labor y confiar en que no se vaya demasiado lejos. Deseo que su sucesor, o sucesora, esté a la altura del cargo, del partido que representa y también, porque no decirlo, de su antecesor.
2 comentarios:
Yo es que no soy nada zaplanista, la verdad, reconozco que su labor es necesaria pero tb que ni su estilo ni su persona son los unicos idóneos.
a "Soyaya" en cambio, pese a su juventud, la veo muy dotada, igual que a la inefable Cayetana, que creo que el único defecto que le encuentro es que tiene el cuello demasiado larga... bueno, y que está (supongo que felizmente) casada.
Gustavo de Arístegui, aunque muy centrado en los AAEE es alguien que tb tiene la cabeza muy bien amueblada, se le entiende cuando habla, lanza con facilidad ideas-fuerza (no está a la altura de Rubalcaba, pero es que este personaje es ÚNICO)... la Cospedal no termina de ser de mi agrado pero le reconozco gran mérito.
En fin, que gente jóven el PP tiene, q quizá sea el momento de, con 4 años por delante, afrontar una renovación y que entre savia nueva... y por arriba... pues como los buenos árboles, cortar las puntas, desbrozar y descargar las ramas más altas y q corren riesgo de secarse o resquebrajarse, pero poco más.
Yo no soy de los que creen que Rajoy deba marcharse. No ha ganado las elecciones, pero ha hecho que el PP, acorralado por todos lados, gane más de medio millón de votos con respecto a las anteriores Generales, mientras que el PSOE, con todo el aparato gubernamental de su lado, con la suma de votos útiles trasvasados desde todas partes (izquierda radical, nacionalismos separatistas, centristas gauchizados...) sólo ha aumentado en poco más de cienmil sus votos.
Las próximas las gana el PP, las próximas las gana Rajoy.
Y otra cosa es que el PP tenga alguien con los suficientes cojones (y el suficiente apoyo!!!) como para plantarle cara al Mariano, decir "aquí estoy yo" y presentarse en el Congreso a disputarle el puesto de candidato.
Entre otras cosas tenemos el grave problema de que debería ser diputado, pq hacer oposición desde los asientos de invitados (Hernández Mancha) es ridículo.
Y en eso, mira que igual no es tan tonto, ya estuvo listo Rajoy, y al final ni Espe ni el Ruín Gallardín tienen escaño.
Eso sí, pensando en el 2012 y no tanto en el hipotético fracaso como en el futuro, Rajy debería admitirlos a los dos en las listas, ella como número dos (si sigue siendo Presidenta del Partido en Madrid) y él como número 3, previa renuncia a sus cargos como Presidenta de la Comunidad Autónoma y como Alcalde respectivamente.
Sinceramente, lo de apostar por jóvenes desconocidos y de probada inexperiencia me da más miedo que el Euribor... véase el ejemplo de ZP!!!
Siempre he dicho que en España una de las cosas, de tantas, que nos faltan es la cultura de la dimisión, es díficil asumir los errores pues sí, pero cando se está en la cosa pública hay que ser consecuente, no por tonteria o inocencia, sino por aquello de ser fiable.
Obviamente la etapa de Zaplana, Acebes u otros ha pasado, pero no por esa capaña de descrédito que han sufrido (no olvidemos el gran apoyo que Rajoy a tenido en ellos) sino porque la renovación de ideas pasa por la renovación de caras.
Hasta ahí todos de acuerdo, lo que pasa es que , sinceramente, las razones que puedo argumentar para que unos dejen el testigo también me sirven para que se vaya otro, y lo de "me quedo porque es lo mejor para el partido y para Essshpaña" es muy fuerte.
No sé si la renovación pasa por Soraya,lo dudo mucho, al menos si es la renovación que se necesita para ganar, porque en política, por más que algunos se empeñen el segundo clasificado no juega la champion.
Cayetana, bueno, es mejor que la anterior, pero como tú dices los desconocidos, al menos en este ámbito que no el el profesional de cada cual, no siempre dan buen resultado, véase por más que duela a Pizarro.
Un saludo.
Publicar un comentario