El trasvasito de ZP

La definición que del término ofrece la Real Academia Española no deja lugar a interpretaciones. Trasvase es la acción de trasvasar que no es sino pasar un líquido de un recipiente a otro.

Hace cuatro años cuando Zapatero aterrizó en Moncloa se dedicó a dar lecciones de su talante, una de ellas fue el cerrojazo, via decreto, al Plan Hidrológico Nacional, con ello empezaba el calvario de las regiones españolas más secas, entre ellas la murciana, junto con el discurso de que la hipótesis de trasvasar agua de las cuencas excedentarias a las deficitarias era algo inviable. Según esta opinión, cada Comunidd Autónoma debería de vivir con sus limitaciones, y aquellas pertenecientes a la llamada España seca, se verían obligadas a adaptar su forma de vida a la nueva política socialista, es decir, a la resignación de su caracter secundario frente a aquellas por las que si transcurría el líquido elemento.

La reacción frente a este ejemplo de insolidaridad entre regiones y vulneración del principio más elemental de equidad por parte del gobierno central, fue el acuñar el lema agua para todos.

Ahora, tras vendernos la moto de querer asfixiar los cultivos aragoneses bajo el yugo de los campos de golf o el fiasco de las desaladoras, el gobierno socialista deshace el camino andado y concede un trasvasito a Cataluña, ante el estupor e impotencia de valencianos, murcianos y almerienses.

¿Es posible que a unos se nos niegue lo que a otros se concede? en la España actual, desde luego. Mi razonamiento ante esta situación no es criticar al gobierno catalán o el envío de agua a los rincones de Barcelona donde se necesite, todo lo contrario, es lo que muchos venimos reclamando desde hace tiempo: que el agua se lleve a todo aquel que lo demande, sea catalán o valenciano, sin mirar el color político del gobierno de la respectiva región española.

El denostado PHN impulsado por el gabinete de José María Aznar pretendía acometer esta gran problema estructural inviertiendo en obras y grandes infraestructuras en muchos lugares, pues la imprevisión en materia de gestión hídrica ha sido una constante en nuestra historia, y esté muy probablemente detrás de la situación actual de Cataluña.

Ya sé que ZP no va a hacer pantanos, pues eso es muy franquista para él, lo malo es que ahora su famosa frase de que no habrá trasvases mientras yo gobierne ha quedado en entredicho, una vez más desde luego, pero esta vez especialmente indignante y ofensiva para tantos españoles que vivimos la sequía tan de cerca. ¿Tendrá el señor Saura desparpajo para justificar tamaña ofensa? pues posiblemente.